Barrio Siloé, en Cali, con pinta blanca para vencer al miedo

Por: Redacción eltiempo.com | 12:32 p.m. | 20 de Febrero del 2011

Con una nueva pinta de blanco y 6.500 metros, esta zona de ladera de Cali estrena mirador

Foto: Juan B. Diaz

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En cinco años, el barrio cambió color, creó ruta turística, calle de arte, esculturas y mirador.

Si se mira al cielo, en las cuerdas de energía, los zapatos cuelgan como recuerdos de amigos idos. Pero si se mira la tierra, desde lo alto de Siloé, es posible ver el resto de la Cali que apenas descubre la vida que se pinta en estas lomas.
Acá se sube después de romper el miedo sobre leyendas de guerrillas y pandillas sueltas. El ascenso lo acompañan redoblantes y silbidos de los 'diablitos', unas comparsas que trajeron hace un siglo los primeros pobladores llegados de Marmato (Caldas). También bajo los violines de la Orquesta Infantil y Juvenil de la comuna 20.
Esta es la Ruta Turística de Siloé, una propuesta que encabeza David Gómez y un grupo de jóvenes nacidos en las entrañas de la ladera. Han pasado visitantes de Francia, Brasil o Suiza. "Es por decir, curioso, que sube más gente del resto de Colombia y otros países, que de nuestra ciudad", comenta.
Para lograr que el recorrido ya tenga sus visitantes se ha debido cruzar un largo camino dada la imagen de violencia y muerte de Siloé. La propuesta tiene raíces desde el 2005 cuando la Fundación Sidoc (Siderúrgica de Occidente) se puso la camiseta de hacer a 'Siloé visible'.
Empezó con la 'Pintatón' de blanco. La idea era que Cali viera de otro color la ladera. Vivianne y Christine Armitage, de Sidoc, sonríen cuando ven las fachadas de unas 4.000 fachadas. Hoy, desde la calle Quinta se puede ver ese color en lo alto.
Las fundaciones como Nueva Luz y Asociación Centro Cultural La Red han extendido las semillas para reinvindicar el barrio más mentado de Cali, como en Cali Pachanguero: 'Qué noches, qué noches tan bonitas, Siloé en sus callecitas, al fondo mi Valle en risa ¡ay! todito se divisa...".
Mirador y parque
Ayer, Sidoc inauguró el mirador 'Yo amo a Siloé', en 6.500 metros cuadrados en 'La Mina', donde en 1997 hubo un trágico deslizamiento. Hay cancha múltiple, plazoleta, área de juegos y teatrino. Desde allí se ven los techos, las arboledas y las avenidas caleñas corriendo abajo.
Es un paso para cambiar eso de tener solo 11 centímetros cuadrados de zonas verdes por habitante.
Los artistas locales han enlucido la glorieta Plazoleta Siloé Visible, con monumentos a la luchadora Jackeline Rentería o el caballo arriero, símbolo del transporte antiguo.
El blog 'La calle', de Martha Isabel Calle, dice que "cuando llegué a Siloé, me invadió la curiosidad. Simplemente no pude mirarla con los mismos ojos de todos, con ojos de marihuana y desconfianza en motocicleta, o con mirada rosa, de ruta turística...el cuento cambió...se diluyó en unos pares de zapatos, aquél símbolo me atrajo como un imán y yo, con disparos al cielo, terminé metiéndome en ellos".
Los muchachos de 'Siloco' dicen que entre los zapatos están colgados los de los amigos muertos, otros han sido prendidos para afinar puntería pero la mayoría son de quienes han forjado esta loma.
En esta zona, jóvenes que dejaron el conflicto crearon la Asociación de Productores y Pintores. En familia elaboran pintura blanca. Además de ser un recurso económico, con ella le están cambiando el tono. Su color blanco en la ladera se divisa desde lejos. Y Lleras Camargo, sector vecino, tiene calle del arte y organizaciones sociales realizan diversas actividades económicas.
Siloé también tiene talento y esfuerzo por mostrar. En sus empinadas calles se formó la luchadora Jackeline Rentería, quien con la guía de Víctor Capacho, suma 15 oros en diversos torneos internacionales, y logró medalla olímpica.
Francisco Ariza, con Fernando Vargas, le hicieron una escultura en la glorieta de Siloé.
A esto se suma el trabajo de la Fundación Fanalca y la comunidad, para cambiarle la cara al parque de La Horqueta.